19 de marzo de 2010

LA MELODÍA DIVINA




Existe un diálogo muy interesante en una de mis películas favoritas ("Mi amada inmortal" de Bernard Rose - 1994), en la cual Beethoven define a su asistente, que el mayor logro de la música es transportar los sentimientos del compositor, a la mente de quien escuche su creación. Muy aparte de las inexactitudes de la película, ese pequeño adorno al guión me pareció genial, al punto de siempre recordarlo al momento de querer componer alguna melodía; por ello al coger la guitarra, siempre indago cuales son mis sentimientos más profundos para así plasmarlo en unas cuantas notas.

Siempre pensé en base a esto, que las notas mayores eran resueltas, las menores tristes, las séptimas esperanzadoras, etc. Y de tal forma, generaba una dominante en función a ello. Pero luego descubrí que no era así. Dibujar los sentimientos en ondas vibratorias para esta dimensión, era muchísimo más complejo de lo que imaginé. Y me di cuenta que rasgar un acorde en Do Mayor, podía ser tan o más triste que cualquier otro, según la forma como uno lo toque.

Lo cual quería decir, que según uno decide afrontar las circunstancias, puede emitir melodías de placer u otras de sosiego. Además de confirmar que la vida misma es una constante composición de melodías, y no de manera lineal, sino multidimensional, es decir, mientras uno se siente contento, un rayo de luz entra por la ventana y emite melodía en otro plano, el perrito sentado a pie de uno, con su cariño, emite otra melodía de acordes en otro plano, y así de manera infinita, todo es una composición musical, tan hermosa como uno lo desee.

La belleza de la música, es poder retratar a la perfección el plano de los sentimientos y ella alberga elementos figurativos en todo sentido. Ello quiere decir, que incluso el silencio es música. De pausas y silencios están llenas las canciones!, ello significa que el silencio también es parte del concierto. El fundamento del metrónomo universal para labrar compases en vorágine o calma, según uno mismo.

Nada en la vida carece de sentido. Y ello porque si estás viviendo, entonces ya perteneces a una composición musical divina, y ella en sí misma, es la música que tú mismo has compuesto. Dado que el tiempo no existe, esto que eres tú, es lo que tú mismo has creado para ti mucho antes, ya que si ahora creas algo y se manifiesta inmediatamente, entonces te habrás fundido con la voluntad divina, con el que TU mismo eres y que te mantuvo existente, y con el tiempo del no tiempo. Si creas y no se manifiesta muy rápidamente, entonces estás en camino. Mentalismo aplicado, le llaman a ese indicio real efectivo.

Es así, como la música no es otra cosa que la voz de Dios. En circunstancias, instrumentos, truenos y sentimientos, todo será conocido por tener naturaleza musical. Imperceptible a primeras en nuestra dimensión, pero fácil de descubrir. ¿Cómo?, ve algo hermoso, algo que te provoque los sentimientos más lindos, observa un arcoíris, o un ocaso en silencio, luego trata de ponerle un fondo musical que esté acorde a tus sentimientos, sé muy imaginativa(o), que para hacer música no se necesita conocer instrumentos, la mente lo puede todo. Apóyate en una melodía que ya conoces, coge sus notas más bonitas y extiéndelas, hazles pausas, usa el coro de ángeles si te parece muy sublime, el violín si te parece romántico, el piano si te parece conmovedor. El resultado que salga, será la melodía real, que tiene ese momento o circunstancia, en el universo mismo. Bien dicen que los grandes músicos, tan solo interpretan la naturaleza para componer sus más bellas creaciones.


J.

8 comentarios:

Ps. Carmen Gloria Segovia dijo...

Muy lindo J.! :)
La música puede vibrar en los mas variados tonos y es un puente muy directo hacia el encuentro de nuestras esencias porque así como podemos ser luz, somos sonido..hasta la última célula..lo que nos lleva a recordar nuestra composición primigénea.

La película "amada inmortal" me transportó totalmente cuando la vi..

Anónimo dijo...

Las preferencias músicales hablan de la espiritualidad de una persona, está siempre habla de la la vibración de cada quien,la esfera del sonido es la casa del ego y con éste se puede elevar aún más.

Isma

Luz Rodríguez dijo...

Muy bueno J. y muy sincronico porque estos días he leido mucho de la música y reflexionado sobre ello... y quería escribir algo al respecto, pero te adelantastes y me alegra...está muy condensada tu entrada, además hablas desde tu experiencia personal y eso lo admiro mucho.Gracias

Con amor...Luz

Anónimo dijo...

Gracias Glo por tu bello comentario. Y sí, definiste bien el conjunto de la idea.

Te regalo la fuga en re menor más famosa que existe. De Bach. Es genial porque define el contrapunto gráficamente. Te sugiero que te quedes hipnotizada con ella:

http://www.youtube.com/watch?v=ipzR9bhei_o


Isma, ciertamente uno analizando los gustos musicales de las personas, se puede descubrir cierta esencia, más no es infalible y suele ser muy complejo.


Luz, que bueno que hayamos pensado en el mismo tema. Pero puedes complementarlo desde tu perspectiva. Sería muy bueno.

Te regalo esta melodía

http://www.youtube.com/watch?v=bsP-RhaAeDg

Gracias, saludos

J.

Ps. Carmen Gloria Segovia dijo...

jajaja demasiado divertido para no comentarlo.....yo estaba toda dispuesta a dejarme hipnotizar por la música que me regalaste....y solo lo asocie con "tom y jerry" cuando jerry hacia sus diabluras ponian esos acordes iniciales....jaja por que me nacerá romper esquemas preestablecidos?
gracias por el regalo, se valora ;)

Ps. Carmen Gloria Segovia dijo...

De la música clásica en general me hacen vibrar las cuerdas (celos) como la 7ma sinfonia y las melodías apasionadas en piano

Anónimo dijo...

Glo,

Quizá algo como esto te gusta más:

http://www.youtube.com/watch?v=ieHeTEQHHDM

J.

Ps. Carmen Gloria Segovia dijo...

lindo mensaje gracias J. :*